El Espejo de Argentina y el Mundo

Año XX - Nº 226 (Segunda época)
Septiembre 2015

12 de mayo de 2015

Objetivo inmediato: un 13 de abril en lo económico



“Estamos puliendo una nueva fase del plan de lucha contra la guerra económica, que va a ser demoledora”, explicó el presidente Nicolás Maduro desde el estado Barinas, donde inauguró un nuevo supermercado de la red Pdmercal.
Antes, a su regreso de la cumbre en Panamá previo paso por Cuba, había aclarado un tema en discusión en filas de las izquierdas latinoamericanas tras el contundente resultado de la cita presidencial de la cual Barack Obama, abrumado por la definición de 33 de los 35 mandatarios a favor de Venezuela, decidió retirarse abrupta y subrepticiamente: ¿aprovecharía Maduro el enorme espacio ganado para conciliar con la oposición interna desde relaciones de fuerza favorables a su gobierno?
Maduro explicó que regresaba “dispuesto a radicalizar la Revolución contra todos los que la sabotean desde lo económico, no me importa el apellido y nombre que tengan. Y pido a los poderes del Estado mano dura”. Tal ratificación la hizo el jefe de Estado, además, en una fecha simbólica: el 13 de abril se cumplían 13 años del fulminante contragolpe con el que pueblo y fuerzas armadas rescataron a Hugo Chávez y lo restituyeron a la Presidencia. “Vamos hacer un 13 abril en lo económico, con el apoyo del pueblo y los ministros, se acabaron las sonrisitas con la burguesía que respondan por los dólares que se les dieron (…) Voy a ir a la raíz y sacar lo podrido que está abajo, ellos creen que pueden continuar con su jueguito abusando de la confianza y de la fe del país”.
Y agregó el Presidente: “El que no pueda sostener su actividad económica que se vaya, pero el que encontremos en conspiraciones de saboteo tiene que ir preso y pagar lo que le hacen al pueblo. Ya basta. Todo tiene un límite”.
A continuación explicó: “Le dije al vicepresidente Ejecutivo (Jorge Arreaza) que sin demoras y sin faltas, citen a los empresarios que recibieron los dólares para la importación de esos dos productos que no se hacen en Venezuela, muy sensibles a la vida adulta. Los investiguen, revisen sus cuentas, vayan a los almacenes y si es necesario, vamos a detenerlos y entregarlos a la fiscalía, porque estoy seguro que están detrás del plan de sabotear a nuestro pueblo”.
“Algunos (de esos saboteadores) son dueños de media ciudad de Panamá. ¿Con qué dólares compraron torres lujosas donde cada apartamento cuesta dos y tres millones de dólares?” preguntó, para agregar: “vamos a apretar la mano, pero pido que la apretemos entre todos”. Para completar la respuesta a la incógnita señalada, Maduro ratificó la determinación de construir el socialismo en Venezuela como única respuesta a la doble escalada de Estados Unidos y la oposición interna. Y subrayó que estas eran las conclusiones comunes de su encuentro con Fidel, donde también se reafirmó el papel estratégico del Alba.

Unidad en la acción
Muy lejos del nuevo tópico enarbolado por la prensa mundial para desprestigiar al gobierno revolucionario, la firmeza contra los saboteadores se encara con mayor participación de los organismos de masas y la creciente cohesión entre estos, el Gobierno y la Fuerza Armada. También con la certeza de que se afronta una instancia clave en las próximas elecciones legislativas, aún sin fecha. Un país abroquelado contra la agresión imperialista adelanta en previsiones confirmadas por todas las encuestas serias que las fuerzas de la revolución vencerán en esa nueva contienda electoral. Pero entre los máximos dirigentes priva la certeza de que no se puede continuar gobernando efectiva y eficientemente si la burguesía tiene espacio para sostener su guerra económica.
La necesidad de producir más y garantizar mejor la cadena de distribución de bienes de todo tipo, así como de acabar con la inflación y la especulación, es una certeza para bases y dirigencias.
En ese contexto se llevó a cabo el primer encuentro de saberes La Caracas que Siembra y Cosecha. El propósito es darle un reimpulso a la agricultura urbana, con el objeto de no seguir dependiendo de las grandes cadenas de producción y distribución de alimentos, explicó el jefe de Gobierno del Distrito Capital, Ernesto Villegas.
“Vamos a revisar cada una de estas experiencias y dar apoyo material a los proyectos que se desarrollan en Caracas, para que dejemos de ser una ciudad con una vocación exclusivamente consumidora (…) Ya se ha iniciado este proceso pero requiere un reimpulso (…) cada vez más ir liberando a Caracas de la dependencia estructural y extrema de los suministros de alimentos y de otra índole de consumo masivo que se producen lejos de sus límites”.
Se trata de uno más en los innumerables emprendimientos apuntados a poner la economía efectiva en manos de la población, a la par que se construye la infraestructura necesaria para mejorar la calidad de vida de millones. Un ejemplo: se inaugurarán este año cuatro sistemas de transporte masivo, tipo Bus Tránsito Rápido (BRT), autobuses articulados en canales exclusivos con amplias estaciones, según el ministro de Transporte Terrestre y Obras Públicas, Haiman El Troudi. “Además de TransMaracay (ya en funcionamiento desde la segunda quincena de abril) este año serán inaugurados tres sistemas más tipo BRT en Ciudad Guayana, Maracaibo y Barcelona-PtoLaCruz”. A la fecha estos sistemas de transporte masivo funcionan en Caracas, Mérida y Barquisimeto, parte de un plan integral de infraestructura vial para este año, con una la inversión total es de 59.575.000 bolívares, 911 millones de dólares y 280 millones de euros.




En su discurso en el Día de la Milicia Nicolás Maduro anunció nuevos planes en lo económico

No hay comentarios:

Publicar un comentario